CARACAS, Venezuela (El Nacional).-La expedición de Quisqueya apabulló a 11 lanzadores rivales mientras sus propios brazos retiraban en blanco los últimos ocho innings y un tercio, para conseguir una victoria sin atenuantes sobre la selección de la Liga Venezolana de Beisbol Profesional, anoche, 8 carreras por 2, en el estadio Universitario.
Los criollos se impusieron en las anteriores ocasiones, 4 por 3 en 2008 y 4 por 0 en 2011, siempre en el mismo escenario. Pero aquel dominio se desbarató esta vez ante el grandeliga Hanley Ramírez y sus compañeros, en el abreboca del Clásico Mundial de Beisbol, que enfrentará a ambos países nuevamente, el 7 de marzo, en San Juan de Puerto Rico.
“No hay mayor orgullo que ganar este encuentro, después de haber perdido los dos pasados”, señaló con satisfacción el manager visitante, Alberto Castillo, que debió que suplantar a Félix Fermín debido a una enfermedad repentina que sufrió el dirigente de las Águilas Cibaeñas.
La revancha de los quisqueyanos tuvo visos de humillación. De no ser por un batazo que se le metió en las luces al rightfielder Ricardo Nanita y un error del center Moisés Sierra en el primer episodio, ninguna de las dos rayitas locales habría existido y el choque habría terminado por blanqueo.
“No siento que los peloteros se hayan comprometido con su responsabilidad de representar al país”, señaló disgustado Buddy Bailey, piloto de la casa, tras ver que no se presentaron algunos jugadores y cómo otros se marcharon en pleno partido.
Hubo 22 monticulistas, 11 por lado. Pero mientras los forasteros, desde el abridor Daniel Cabrera hasta el cerrador Luis Perdomo, salían de problemas con una anotación merecida en total, los anfitriones recibieron castigo, especialmente a partir del jonrón de dos carreras que golpeó Frank Peña contra Víctor Moreno en la alta del segundo, que volteó para siempre la pizarra y enrumbó la venganza dominicana.
Por Ignacio Serrano