Por Alexandro Rodríguez Escarraman
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SANTO DOMINGO (Licey.com).- Ante la urgencia que enfrentaban los Tigres del Licey con cinco derrotas seguidas y sintiendo el acoso de las Águilas Cibaeñas en la parte final de la semifinal Todos Contra Todos, Luis Urueta no podía decir que no.
Y más que realizar cambios de estrategia de juego, lo que quiere variar es la mentalidad de los jugadores para dejar atrás el mal momento y retomar el sendero del triunfo.
“Decir que no era imposible. He sido parte de este club por los últimos cuatro años”, dijo al ser abordado por la prensa antes de su debut ayer como dirigente de los Tigres en sustitución de Pedro López. El Licey superó 7-4 al equipo cibaeño para detener su mala racha.
Agregó que más que buscar una reacción por el cambio de manager es por la urgencia de los resultados que de una u otra manera no habían sido los mejores y ayudar a los jugadores con palabras de aliento y motivación.
“Estrategias no hay ninguna. Este es el mismo equipo que hace una semana era prácticamente invencible con ofensiva importante, pitcheo correcto, buena defensa, que venía de atrás, corría bien las bases, pero de un momento a otro se fue desapareciendo. La estrategia es mental, que se quiten la presión de los últimos juegos del Round Robin”, añadió Urueta.
Dijo que espera una reacción del club tras un desafortunado bajón de cinco días, que no habrá ningún cambio drástico, que los titulares son los que tienen que estar y que hay alternativas en el banco que pueden aportar en la parte final de los partidos.
“Mis compromisos (con la organización de los Diamondbacks de Arizona) han culminado tanto en el complejo como en Arizona con muchos jugadores que ya se han reportado. Decir que no al Licey es imposible ya que le agradezco gran parte de mi carrera, sobre todo a Junior (Noboa, el gerente general) que me ha tenido aquí y ante la urgencia del momento no podía darle la espalda. Pedro hizo un tremendo trabajo, la directiva lo mantuvo en un momento crítico y pudo salir adelante”, añadió.