Quizás a muchos les sorprenda que los Cardenales de San Luis tengan el mejor record de las Grandes Ligas. En mi caso, no estoy dentro de los “agarrados fuera de base”.
En esta disciplina es frecuente ver o escuchar pronósticos basados en los grandes nombres que tenga el roster de un equipo. Sin embargo, el béisbol es mucho más que eso.
A finales del 2011 se fue Albert Pujols. ¿Qué pasó en la temporada 2012? El conjunto llegó a la Serie de Campeonato. Para el 2013, los Cardenales empezarían la campaña sin el estelar Chris Carpenter, sin un ganador de 16 partidos como Kyle Lohse, sin su cerrador Jason Motte (42 rescates), sin su torpedero Rafael Furcal, con dudas de salud en Jaime García y con la partida de un versátil jugador como Skip Shumaker. ¿Cómo van hasta ahora? La respuesta está en el primer párrafo.
El éxito de esta organización está basado en aspectos específicos: fundamentos, cultura ganadora y de clubhouse, scouteo, desarrollo de jugadores y dar oportunidades.
La semana pasada estuve viendo un partido de San Luis y la satisfacción de ver un béisbol de tanta calidad me hizo colocar un “tweet” inmediatamente: “Cardenales es un equipo de sólidos fundamentos. Si no es el mejor, está en el Top 3”.
Los Orioles del legendario manager Earl Weaver tenían una famosa etiqueta: “fundamentos de los Orioles”. Weaver era un fiel creyente del jonrón de tres carreras, el pitcheo y la defensa, pero siempre resaltaba que su equipo era ganador también por la forma en cómo los jugadores trabajaban duro en los fundamentos.
Detalles como jugadas de corte con tiros desde el outfield, colocarse en buena posición, tirar a base correcta, asistencia detrás de un compañero, pitchers aplicar lo que practican en ejercicios defensivos, entre otros, pueden lucir pequeños pero al final son los que pueden decidir el juego.
Esos son aspectos en los cuales San Luis se enfoca con ahínco desde las ligas menores.
La cultura ganadora de esta organización es algo de décadas y una muestra es ser el equipo de la Liga Nacional con más campeonatos.
Para lograr esto, una organización tiene que hacer énfasis en tener personas, tanto en el terreno como en oficina, que sean de alto carácter. Si hablamos de jugadores, solo basta con ver la presencia de Yadier Molina, Matt Holliday, Adam Wainwright y Carlos Beltrán, quienes, con su experiencia y cualidades, son los líderes vocales y ejemplares de jóvenes que juegan con competitividad tales como Jon Jay, Pete Kozma, Matt Carpenter, Allen Craig, Lance Lynn entre otros.
Peloteros con personalidad, gran carácter y entrega son elementos en los que está organización trabaja desde los circuitos minoritarios a través de su programa de desarrollo de jugadores. ¿Alguna vez usted ha escuchado que X jugador tiene el perfil Yanqui? Pues San Luis también se enfoca en determinar si los jugadores que firmará en agencia libre y en draft tienen el perfil Cardenal.
No es coincidencia que año tras año, San Luis tenga jóvenes destacándose y que pocos conocían. Eso se debe a un fuerte trabajo de scouteo, desarrollo de jugadores y un enfoque determinado para moldearlos al estilo de la organización.
Las oportunidades son vitales en la vida. Todo ser humano necesita una oportunidad para demostrar su talento y pasión. Los Cardenales han demostrado que no les tiembla el pulso para darle el chance a un novato, sin importar que sea para una posición crucial.
Ante las lesiones que ha tenido el pitcheo este año, los pájaros rojos han tenido que subir a ocho lanzadores novatos al equipo grande. Ocho no es un número común de asensos y menos tan temprano en la temporada.
En mayo, el combinado tuvo record de 20-7 y una parte esencial de ese éxito se debió a la labor de cinco novatos: Shelby Miller, Trevor Rosenthal, Tyler Lions, Seth Maness y Michael Wacha.
Por otro lado, usted encuentra un Matt Carpenter jugando diario y bateando por encima de .300 y embasándose de forma admirable; un Pete Kozma que está jugando una excelente defensa como shortstop; y un Matt Adams que ha dado batazos claves y ha sido productivo.
Todos esos atributos que tiene San Luis como organización están combinados con buenos resultados estadísticos en esta campaña: líder en carreras anotadas por juego en la Liga Nacional (4.81); segundo en porcentaje de embasarse con .332; quinto en OPS con .728; segundo en wRC+ con 123; cuarto en wOBA con .318; segundo equipo que menos se poncha por apariciones con 18.1%; hace contacto en el 81.8% de sus swings realizados (2do) y es el segundo equipo que menos abanica lanzamientos con 8.2%.
En el pitcheo, tiene el mejor promedio general de carreras limpias con 3.00; segundo mejor porcentaje de ponches por apariciones con 21.5%; es el equipo que menos transferencias otorga con 6.6%; WHIP de 1.19 (3ro); quinto menor promedio de bateo de la oposición con .245; segundo mejor porcentaje de rodados con 50.2%; tercer mejor porcentaje de swing abanicados con 9.5% y séptimo combinado al que menos contacto le hacen con 79.5%.
Finalmente, la defensa es un tópico en el que tendrán que trabajar para poder llegar lejos este año. Los Cards tienen -25 en Carreras Defensivas Salvadas (últimos), -9.6 en UZR (14) y .691 en Raiting de Eficiencia Defensiva (11).
Personalmente, pienso que Cincinnati será el ganador de la División Central de la Nacional y que San Luis se quedará con uno de los dos Wild Cards…pero los dirigidos por Mike Matheny tienen las piezas y la estructura para mantenerse en la cima.
Por Daniel Rufenacht
Staff Licey.com
PIE DE FOTO
St Louis Cardinals v New York Mets
Members of the St. Louis Cardinals warm up prior to the game against the New York Mets at Tradition Field on February 27, 2013 in Port St. Lucie, Florida. (February 26, 2013 – Source: Chris Trotman/Getty Images North America)