Licey celebra encuentro familiar

Familia presidencial

JUBEY, Boca Chica (Licey.com).- El Club Atlético Licey celebró este domingo 11 de Octubre un grande y hermoso encuentro social denominado “Licey Family”, en el que directivos, jugadores nativos e importados y el personal de todas las áreas, con sus familias, compartieron animadamente y pusieron de manifiesto la mística y hermandad que caracteriza a la gloriosa organización del béisbol profesional dominicano.

“Licey Family” tuvo lugar en la academia de los Mets de Nueva York, en Boca Chica, Centro de entrenamiento del equipo Tigres del Licey con vista a la temporada 2015-16”, que comienza el próximo jueves 15. Fue el primero de una nueva iniciativa de acercamiento social entre los que conforman la familia liceísta.

El pasadía familiar que reunió a cerca de 300 personas, comenzó con las palabras de bienvenida por el presidente del club, licenciado Miguel Ángel Fernández; la invocación religiosa estuvo a cargo del ex jugador de los azules y de Grandes Ligas Tony Fernández; más una conferencia motivacional, por el especialista en esa materia, señor Julio Bueno.

En sus palabras de bienvenida, el licenciado Fernández exhortó a los asistentes meditar acerca de las reflexiones que esbozó el Papa Francisco durante su reciente paso por Filadelfia, en los Estados Unidos, en los que habló de la unidad familiar, del matrimonio y la vida espiritual.

“Cada uno de lo que estamos aquí, somos unos bendecidos de pertenecer a esta gran familia, que aunque no es perfecta, ha perdurado por más de un siglo y es más grande que cualquiera de nosotros individualmente: ahí está una de nuestras mayores fortalezas”, expresó el presidente del Licey.

Reflexionó acerca de que el trabajo en equipo divide la carga y multiplica los resultados, que “unidos somos más fuertes, unidos sufrimos, unidos gozamos y unidos seguiremos alcanzando la gloria para nuestro amado Licey !!!

Fernández hizo sus pronunciamientos, tras citar las reflexiones del Papa en Filadelfia, quien dijo:

“No existe familia perfecta, no tenemos Padres perfectos, no somos perfectos, no nos casamos con una persona perfecta ni tenemos hijos perfectos. Tenemos quejas de unos a otros. Nos decepcionamos los unos a los otros. Por lo tanto no existe matrimonio saludable ni familia saludable sin el ejercicio del perdón”.

“El perdón es vital para nuestra salud emocional y sobrevivencia espiritual. Sin Perdón la familia se convierte en un escenario de conflictos y un bastión de agravios. Sin el perdón la familia se enferma. El perdón es la esterilización del alma, la limpieza de la mente y la liberación del corazón”.

“Quien no perdona no tiene paz del alma ni comunión con Dios. El dolor es un veneno que intoxica y mata. Guardar una herida del corazón es un gesto autodestructivo. Es Autofragia”.

“Quien no perdona se enferma físicamente, emocionalmente y espiritualmente. Es por eso que la familia tiene que ser un lugar de vida y no de muerte; un territorio de curación y no de enfermedad; una etapa de perdón y no de culpa”.

“El perdón trae alegría donde un dolor produjo tristeza; y curación donde el dolor ha causado enfermedad. En las familias también hay dificultades, pero esas dificultades se superan solamente con amor. El odio no supera ninguna dificultad. La división de los corazones no supera ninguna dificultad, solamente el amor es capaz de superar la dificultad, el amor es fiesta, el amor es gozo, el amor es seguir adelante!!”.

Por Dimaggio Abreu
Licey.com

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