La Serie Final de la Liga Profesional de Béisbol, que da inicio esta noche en Caguas, tiene un pique especial: huele a revancha y se ha convertido en un reto personal.
Y es que los Indios de Mayagüez vencieron a los Criollos de Caguas en la serie de campeonato de la temporada 2009- 2010 y por las pasadas semanas los directivos de ambas novenas se han enfrascado en una lucha de poder sacando a relucir todos 'los trapos sucios' que habían decidido guardar a principios de temporada.
Pero, sobre el terreno de juego, los Criollos parecen llevar la mejor parte a pesar de que la serie particular durante la fase regular del torneo quedó empatada 7-7 y que llevan nueve días de inactividad.
Para el gerente general de los Criollos, Frankie Higgingbotham esta serie estará marcada por el pitcheo y la defensa.
“Nosotros empatamos en la serie regular, pero en la postemporada eso no importa. En esta serie va a ser determinante el pitcheo y la defensa, y en ese renglón nosotros estamos más equipados que ellos. A pesar del tiempo que hemos estado sin jugar tenemos las de ganar”, aseguró Higginbotham.
Caguas fue el equipo que menos errores cometió con 23, mientras que Mayagüez cometió 43, la mayor cantidad de pifias en todo el torneo.
Además de su defensa, la mayor debilidad de los Indios radica en la inestabilidad de su rotación. Un punto que quedó al descubierto en la serie ante Ponce cuando sólo tenían dos abridores seguros: Jon Huber y Bobby Livingston.
Pero, para la final, los Indios no contarán con Huber luego que sufriera, el jueves, un desgarre en el manguito rotador del brazo derecho.
Ahora, Mayagüez tendrá que iniciar la serie con Livingston, esperar que el derecho Hiram Burgos vuelva a demostrar la solidez y consistencia de hace dos años y porque los relevistas Benigno “Benny” Cepeda y Robert Manuel les den la mano desde el bullpen.
En Caguas sucede todo lo contrario. Desde el principio de temporada los Criollos cuentan con una rotación establecida que sólo será cambiada en la postemporada ante la contratación de varios importados.
La yegüita se reforzó con jugadores como el abridor de los Gigantes de Carolina, Matt DeSalvo, y a los relevistas zurdos de Ponce, Joe Testa y Sergio Espinosa, así como los lanzadores Claudio Galva, José Rosario, Félix Romero y Mike Loree.
Así las cosas, la rotación de Caguas quedará compuesta por DeSalvo, Rosario, Luis Cruz y Loree.
Por otro lado, la ofensiva de los Indios presenta su mayor interrogante en uno de sus pilares, Randy Ruiz, quien tuvo que salir del partido del jueves luego de sufrir molestias en su pierna derecha.
El inicialista está siendo evaluado día a día y se espera que jugue esta noche.
El jardinero de los Indios, Miguel “Mickey” Negrón, pidió a los fanáticos un voto de confianza para la tribu tras asegurar que los juegos se ganan en el diamante y no en el papel.
“Jugué 11 temporadas con Caguas y puedo decir que el equipo de ahora no es mejor al de esa época. A nosotros Caguas no nos intimida. Nosotros hemos llegado a la postemporada con un núcleo de peloteros que no nos daban para ganar”, sostuvo Negrón.
“A nosotros nos estuvieron subestimando y demostramos que los juegos se ganan sobre el terreno de juego. Yo jugué para Caguas en una final ante Mayagüez y puedo decir que cuando el Indio saca sus flechas es peligroso, así que vamos a nosotros 100%”, sentenció.
El reto está listo, sólo falta que rompa la acción a las 7:15 p.m. en el estadio Yldefonso Solá Morales.
Por Karla Pacheco Álvarez
Primera Hora